La pasada semana, el juez Pedraz archivó la causa contra Guillermo Zapata por los tweets ofensivos. Básicamente, y resumiendo mucho el caso, Guillermo Zapata, periodista y escritor, abrió un debate en su cuenta de Twitter a raíz de los tweets que el director de cine Nacho Vigalondo lanzó en la red social, de humor negro, que le valió que el País dejara de llevarle la campaña publicitaria de su última película. Ya escribí en su momento acerca de esto en el periódico de mi instituto.
La cuestión por la que traigo aquí la noticia es la siguiente: creo que no habría sido posible condenar a Zapata, desde un punto de vista pragmático. Independientemente de la libertad (o no de expresión).
Supongamos que el humor negro que contienen esos tweets es tan ofensivo, que son punitivos. Bien, pero muchos de esos tweets son, de hecho, copias de los chistes que hizo Vigalondo en Twitter. Con lo cual, él también debería ser imputado, y condenado.
Es más, quienes retwittearon esos tweets, pueden haberlo hecho precisamente porque les parecería gracioso. ¿Qué diferencia punitiva habría entre quien publica el tweet y quien, viéndolo gracioso, lo retwittear? No me parecería lógico que hubiese mucha diferencia; en esta red social, retwittear normalmente significa que estás de acuerdo con el tweet que compartes.
Ahora bien, no sólo el humor negro existe en las redes sociales. Esta es sólo una ventan por la que aflora, pero esos chistes se cuentan en la calle (créanme, yo conozco bastantes, más de los que querría). La gente los cuenta, y se ríe. Habría que buscar en la calle, grabar conversaciones, analizar y presentarlas como prueba.
Lo que quiero decir es, independientemente de si pueda parecer orwelliano o no, que no es tema de debate, ¿realmente sería práctico crear cuerpos policiales que se dediquen a estas labores? ¿A cuántos policías habría que contratar para que pudiese llevarse a cabo la búsqueda y captura de autores de humor negro? ¿Cuántas otras actividades policiales deberían dejarse aparcadas para destinar policías a plantar micrófonos y cámaras en las calles?
Más allá del puro debate moral, la condena sería impracticable.
Sin duda que hay humor negro aceptable, pero cuando se mencionan personas concretas, el humor negro puede llegar a convertirse en insulto o incluso amenaza, en cuyo caso me parece que esto último prevalece sobre el sentido del humor.
ResponderEliminarEntiendo lo que dices, pero la cuestión no es si es aceptable o no el humor negro. La pregunta que lanzo es, ¿es posible que un Estado controle el humor, o las opiniones, que destilan sus ciudadanos?
EliminarEntiendo que, la apología al terrorismo o al fascismo es tan pequeña que sí se puede controlar, pero los chistes que Zapata cita (ojo, que ya los había contado antes Vigalondo) son de conocimiento popular. Yo ya sabía el del cenicero y los judíos antes de que saliese en las noticias.
¿Se debería condenar a Zapata? No, rotundamente, no. ¿Por qué? Muy sencillo: el humor negro, a fin de cuentas, no deja de ser una forma de expresar una opinión. Hablaríamos de delito si fuesen los propios agraviados, quienes ejercitasen acciones penales, pero es que no lo han hecho. O sea, que la Audiencia Nacional se dedique a esto, habla un poco mal de ella, por mucho que Manos Limpias haya interpuesto una querella.
ResponderEliminarDicho esto: no me gusta Zapata, ni Carmena, ni las candidaturas en común. Pero, si alguien quiere pedirle algún tipo de responsabilidad a Zapata, que Carmene lo cese de sus funciones, simplemente. Muy buena entrada, Carlos. Soy nuevo por aquí, y creo que me voy a quedar entre sus seguidores. Le dejo, si quiere, mi bitácora y, en especial, esta entrada, que quizás le interese. ¡Un abrazo y buen fin de semana!
https://ourgodsaredead.wordpress.com/2015/10/06/por-que-hay-que-suprimir-el-tribunal-constitucional/
Claro Alex, pero el post iba más enfocado hacia si, aunque comparto tu opinión de que no se debería, se podría, garantizando los principios de igualdad y justicia. Y, como expreso en la entrada, creo que no se puede llevar a todos los que cuentan humor negro a la cárcel.
EliminarAgradezco que, aunque no compartas la ideología de esta gente, veas bien la entrada. Me pasaré por tu blog cuando tenga tiempo ;)